martes, 8 de mayo de 2012

INSOMNIO


El Sol se ha puesto, llega la noche y con ella las pesadillas, este inefable trastorno del sueño que atormenta mi ser con visiones macabras del pasado. Hace tanto tiempo que me persiguen y el esperar su llegada cada noche se ha vuelto parte de mi insana rutina. El día transcurre lento y enfermizo, me aferro a la luz como un agónico a la vida, sin embargo es inevitable, sé que regresarán.

Espero su arribo con inusitada impaciencia, la reclusión en este sanatorio ha conseguido revelar mi faceta masoquista, esta noche será distinta. Por fin, la figura encapuchada cruza el umbral de mi celda, se acerca con pasos que hielan mi sangre y trastornan mis sentidos. Pienso en ti mi amor y el recuerdo de tu mirada me brinda la fuerza para enfrentar al espectro. El vidrio de mi ventana se quiebra y arremeto contra aquella sombra en medio de un frenesí demencial, la sangre hace que mi visión se torne escarlata y lo disfruto, hasta que de entre el diluvio carmesí surge el lánguido brillo de tus ojos y se extingue lentamente.


¿Qué he hecho? ¿No era todo parte de un sueño lúcido? El terror que me invade no es ficticio, escucho mis gritos desgarradores resonar en toda la habitación y despierto. A mí alrededor aparecen de nuevo los guardias, me aprisiona la camisa de fuerza y regreso al artificial letargo que proporciona la morfina.

Las pesadillas son tan reales como la vida misma...

Leunamägo

sábado, 5 de mayo de 2012

WIE LANGE NOCH?

Medrosa sensación invade mi ser,
ahora que siento mi alma desnuda
y aún sin quererlo, me dejo envolver
por esa frívola y tormentosa duda...

¿Hasta cuando?
Encontraré el verdadero significado de la vida
no sólo como una triste y trágica agonía.


¿Hasta cuándo?
Dejaré de ser un simple espectador,
Para conocer las delicias y no infortunios del amor.


¿Hasta cuándo?
Cesarán mis cánticos a la luna
clamando alcanzar de sus estrellas alguna.

¿Hasta cuando?
Se desvanecerá completamente el frío
al encontrar en tus brazos abrigo.

¿Hasta cuándo?
Guiará mis pasos la celestial luz de tu sonrisa
y sanará mis heridas una suave caricia.


¿Hasta cuándo?
Podré escuchar tu voz en el viento
y sentir en mis labios tu aliento.
¿Hasta cuándo?
Podré embriagarme de tu exquisito aroma
al tenerte a mi lado cuando el sol se asoma.

¿Hasta cuándo?
Iremos más allá de la amistad
para afrontar juntos la eternidad.


¿Hasta cuándo?
Cruzando fugazmente las miradas,
sentiremos nuestras almas entrelazadas.

Entonces, del silencio surge esa tu  voz
como fulgurante y clara luz en la oscuridad
desvaneciendo las dudas, los miedos
invitándome a re-descubrir la felicidad.

Leunamägo